La Verificación Técnica Vehicular (VTV), obligatoria en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, ha experimentado una actualización en sus precios, en vigor desde el mes de mayo de 2024. Esta revisión responde a la necesidad de mantener la operatividad y calidad del servicio, en un contexto económico complejo y en permanente transformación.
Este mecanismo de control resulta imprescindible para garantizar que los vehículos que circulan por la ciudad se encuentren en condiciones óptimas de seguridad y funcionamiento, no solo para preservar la vida de los conductores y peatones, sino también para reducir el impacto ambiental que generan los automotores con desperfectos o emisiones fuera de norma.
Importancia estratégica de la VTV en la ciudad
Más allá de su carácter obligatorio, la VTV cumple una función estructural en la estrategia de movilidad y prevención vial de la Ciudad. Las autoridades consideran que esta inspección anual contribuye directamente a reducir siniestralidad vinculada a fallas técnicas, como frenos defectuosos, neumáticos en mal estado o problemas de iluminación.
Además, permite realizar un diagnóstico regular del estado general del parque automotor urbano, lo cual aporta datos relevantes para diseñar políticas públicas más eficaces. De hecho, los informes generados por los centros de verificación han permitido en años anteriores detectar patrones de desgaste o de mantenimiento deficiente en determinados modelos de autos, incentivando campañas específicas para subsanar esos déficits.
Actualización tarifaria: por qué se ajustaron los valores
El nuevo cuadro tarifario contempla un incremento del 12% sobre los valores previos, ajustándose de acuerdo con el aumento de los costos operativos de las plantas verificadoras. Este ajuste se atribuye a diversos factores: entre ellos, el incremento de salarios del personal, el valor del alquiler de los predios, el costo de los repuestos y herramientas –muchos de los cuales son importados–, y el mantenimiento de los equipos tecnológicos utilizados en cada inspección.
En este contexto, se argumenta que la VTV representa un porcentaje menor en la economía anual del conductor, ya que el gasto en verificación técnica ronda apenas el 2,5% del total de los costos de un vehículo. Estos costos incluyen además el seguro, el impuesto automotor, la carga de combustible y el mantenimiento general.
Desde el Gobierno de la Ciudad explican que la suba busca preservar la calidad del servicio, manteniendo estándares internacionales y evitando el deterioro de la infraestructura técnica.
Nuevos precios vigentes desde mayo de 2024
Los nuevos valores, que ya incluyen el IVA y el arancel correspondiente al servicio, se detallan de la siguiente manera:
- Automóviles particulares: $24.054,80
- Motocicletas: $9.043,54
Cabe resaltar que las tarifas actualizadas son aplicables tanto a vehículos radicados en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires como a aquellos de jurisdicciones vecinas que deben cumplir con la VTV por motivos de circulación frecuente o requerimientos laborales.
Un sistema moderno y con capacidad de respuesta
En los últimos años, el sistema de VTV ha incorporado mejoras tecnológicas y logísticas para optimizar la atención al ciudadano. Entre estas mejoras se destacan:
- La posibilidad de sacar turno por internet de manera rápida y sencilla.
- La implementación de un sistema informatizado de registro, que permite seguir el historial técnico del vehículo año tras año.
- La emisión de informes detallados, con los puntos críticos detectados durante la inspección.
El proceso completo no demora más de 20 a 30 minutos, y en caso de no aprobar, el usuario cuenta con un plazo de 60 días para realizar las reparaciones necesarias y volver a verificar sin costo adicional.
Participación ciudadana y control social
En línea con una política de transparencia y participación activa, las autoridades invitan a la ciudadanía a expresar sus opiniones y sugerencias sobre el funcionamiento de la VTV y sobre la reciente modificación tarifaria. Para ello, se habilitó un formulario digital, accesible desde este enlace:
Este canal de comunicación busca fortalecer el vínculo entre el Estado y los usuarios del sistema, y propiciar un debate informado sobre la calidad del servicio, la relación entre costos y beneficios, y posibles estrategias de mejora. La intención es que la experiencia del ciudadano se convierta en un insumo valioso para rediseñar políticas públicas relacionadas con la movilidad urbana.
Excepciones, bonificaciones y casos especiales
En algunos casos, los conductores pueden acceder a beneficios o exenciones en el pago de la VTV:
- Personas con discapacidad motriz (que posean vehículos adaptados o bajo su titularidad) están exentas del pago.
- Jubilados y pensionados con ingresos mínimos también pueden solicitar una exención, siempre que cumplan los requisitos establecidos.
- Algunos planes de asistencia social contemplan descuentos o bonificaciones parciales.
Para tramitar cualquiera de estas excepciones, es necesario presentar la documentación correspondiente ante los canales oficiales del Gobierno de la Ciudad o en las mismas plantas de verificación.
Cómo sacar turno para realizar la VTV
El procedimiento para solicitar un turno es sencillo y puede realizarse a través de la web oficial del Gobierno de la Ciudad, ingresando a:
Allí, el usuario debe ingresar sus datos personales, dominio del vehículo, seleccionar una planta verificadora, elegir día y horario, y confirmar la reserva.
Se recomienda solicitar turno con anticipación, especialmente en épocas de vencimientos masivos, ya que la demanda puede generar demoras.
Las autoridades de la Ciudad remarcan que la VTV no solo tiene una finalidad técnica, sino también una dimensión ambiental y social. Controlar que los autos no emitan gases contaminantes por encima de los límites permitidos contribuye a reducir la huella ecológica del parque automotor y mejora la calidad del aire en zonas urbanas densamente pobladas.
Por otra parte, asegurarse de que un vehículo esté en condiciones para circular ayuda a prevenir accidentes evitables, lo que se traduce en un beneficio directo para todos los actores del tránsito.
De cara al futuro, se proyectan nuevas inversiones en tecnología, capacitación del personal y expansión de la red de plantas verificadoras, con el objetivo de brindar un servicio cada vez más eficiente y amigable para los usuarios.