Para ser considerado de clase media en la Ciudad de Buenos Aires, una familia tipo necesitó en septiembre de 2025 al menos $1.997.377 mensuales, según un informe del Instituto de Estadística y Censos de la Ciudad (Idecba). El valor máximo de ese rango alcanzó los $6.391.608, monto a partir del cual los hogares se clasificaron como pertenecientes a los sectores acomodados. Por debajo de esa franja, el Idecba ubicó al sector medio frágil —con ingresos de entre $1.597.902 y $1.997.377— y a los no pobres vulnerables, con montos de $1.255.934 a $1.597.902.
El organismo publicó los resultados en el Informe N°1985, difundido el 13 de octubre, que actualiza las líneas de indigencia, pobreza y las canastas de consumo correspondientes al mes de septiembre. El relevamiento tomó como referencia a un hogar conformado por una pareja de 35 años económicamente activa, propietaria de su vivienda y con dos hijos de 9 y 6 años, el cual necesitó $674.757 para no ser indigente y $1.255.934 para no caer bajo la línea de pobreza. En ese mismo caso, la Canasta Total de Consumo (CT) ascendió a $1.597.902 mensuales.
De esta manera, el estudio estableció seis estratos sociales: indigentes, pobres no indigentes, no pobres vulnerables, sector medio frágil, clase media y sectores acomodados. Los hogares que percibieron ingresos inferiores al valor de la Canasta Básica Alimentaria fueron considerados indigentes, mientras que quienes superaron los $6,3 millones mensuales integraron el grupo más alto.
El informe recordó que el Sistema de Canastas de Consumo de la Ciudad fue creado en 2008 para medir la capacidad de los hogares de cubrir bienes y servicios básicos compatibles con el nivel de vida urbano. Desde marzo de 2022, los valores se actualizan mensualmente según el Índice de Precios al Consumidor de la Ciudad de Buenos Aires (IPCBA).
Las cifras también permiten comparar la situación económica de los hogares porteños con los de los 24 partidos del Gran Buenos Aires, conformando un panorama general del poder adquisitivo en el área metropolitana.
El Idecba detalló además las diferencias según el tipo de hogar. Una pareja joven de 25 años propietaria necesitó $340.697 para no ser indigente y $624.425 para superar la pobreza. En el caso de un adulto soltero de la misma edad, los valores fueron $221.232 y $449.029, respectivamente. Para una pareja de jubilados propietarios, el ingreso mínimo para no ser indigente fue $409.279, y para no ser pobre, $726.793. En tanto, una pareja joven inquilina requirió $409.279 para no caer en la indigencia y $862.191 para superar la línea de pobreza, evidenciando el fuerte impacto del alquiler en el presupuesto mensual.
En cuanto a las canastas porteñas, el Idecba indicó que, para la familia tipo, la Canasta Alimentaria (CA) alcanzó los $748.997, mientras que la Canasta Total (CT) —que incluye bienes no alimentarios— llegó a $1.597.902. En agosto, los montos habían sido de $731.502 y $1.562.034, respectivamente, y un año atrás, en septiembre de 2024, de $592.617 y $1.238.733.
El informe también detalló las canastas para distintos tipos de hogares: una pareja joven propietaria necesitó $378.182 para la canasta alimentaria y $829.726 para la total; un adulto solo debió afrontar $245.573 y $568.905; y una pareja de jubilados, $454.309 y $928.344, respectivamente.
Estas diferencias, explicó el Idecba, reflejan cómo el tamaño del hogar, la edad de sus integrantes y la condición de tenencia de la vivienda inciden directamente sobre los gastos mensuales. Además, la actualización mensual de las canastas permite analizar la evolución del poder adquisitivo y la heterogeneidad de los sectores sociales dentro de la Ciudad de Buenos Aires.
