La Ciudad de Buenos Aires (CABA) experimentó recientemente un fenómeno climático inusual para la estación invernal: la ciclogénesis, un sistema que en los últimos días provocó lluvias intensas, fuertes ráfagas de viento y diversas complicaciones en varias provincias del país.
Aunque la situación comienza a estabilizarse, las autoridades mantienen advertencias vigentes. El Servicio Meteorológico Nacional (SMN) indicó que el nivel de alerta descendió a categoría amarilla, lo cual implica que, si bien el fenómeno pierde fuerza, aún puede tener efectos sobre las actividades cotidianas.
Luego del paso de las tormentas, persisten ráfagas intensas que afectan gran parte de la Ciuada de Buenos Aires. Los vientos, provenientes del sudeste, podrían superar los 70 km/h, por lo que se recomienda continuar con precauciones, en especial al circular en vehículos livianos, motocicletas o a pie en espacios abiertos.
La ciclogénesis es el proceso de formación y desarrollo de un ciclón en los niveles bajos de la atmósfera. Aunque puede presentarse en cualquier momento del año, es más frecuente durante la primavera y el otoño.
Lo llamativo de este episodio es que ocurrió en pleno mes de agosto, una época en la que no suelen registrarse tormentas tan estructuradas ni vientos de semejante intensidad. En diversas zonas del centro y norte del país, las precipitaciones acumuladas superaron los promedios habituales para la temporada, provocando anegamientos y retrasos en los servicios de transporte.
¿Cuándo vuelve el “veranito” a la Ciudad?
La buena noticia es que el clima comenzará a mejorar con el arranque de la próxima semana. Según los pronósticos, un sistema de alta presión favorecerá el ingreso de aire cálido desde el norte del país. Esta situación propiciará un notable aumento de las temperaturas, y el lunes 25 de agosto podría registrarse un verdadero “veranito” en pleno invierno, con máximas cercanas a los 20 grados, un valor completamente atípico para esta época del año.